
Este es el San Lorenzo que quiero, aun con sus limitaciones.
El que va al frente y el que nos tiene acostumbrados a esos cinco minutos finales de siempre.
Este es el San Lorenzo que me emociona; como aquellos camboyanos.
Este es el que le da alegría a mi vida.
Asi uno confía en superarse. Con actitud.
Vamos que todavía podemos.
Vamos CICLON
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